Un lectura posible:
Tomare la película, con una lógica a partir de tres momentos
que podríamos plantear en el desarrollo de la misma:
1- Cuando
la protagonista con su vida estaba
estabilizada (Nina esforzándose para ser la mejor bailarina)
2- Cuando
comienza su desencadenamiento y los efectos.(Nina se convierte en la Reina de
los cisnes, la dualidad cisne negro-blanco, desencadenamiento)
3- El
desenlace, con su muerte.(Nina enloquecida logra la perfección y la libertad)
Una vez más el cine y el psicoanálisis
pueden encontrarse para analizar en las tramas particulares de las películas,
esos puntos en común que tenemos: trabajar con las historias. Aun más diría que
el psicoanálisis puede servirse del cine para analizar al modo de un caso lo
que allí se presenta. Es en esta perspectiva que el cine, la literatura,
recordemos Joyce, Schereber... Tienen mucho para enseñarnos.
La riqueza de esta película además de su guion, música y arte escénico,
es un testimonio para estudiar los
detalles valiosos que nos aporta para pensar
la psicosis.
1) La vida de la protagonista encerrada en
el mundo dual con su madre, cumplía cual niña pequeña un acotado circuito
social a través del ballet. (Rutinas, ensayos, preparaciones con su madre,
peinados, aros, la música al dormir)
Tomada como objeto materno, su ser
bailarina la anudaba a la vida con ese sesgo mortificante, inanimado como
resultado de la ausencia fálica.
La cajita musical de la bailarina, que
prende y apaga su madre nos representa a ella, la sujeto bailarína, encerrada
allí en el deseo materno sin mediación
alguna.
La madre ex bailarina hace de esta hija su
objeto de cuidado, imprime un goce intrusivo sobre el cuerpo de su hija, la que
responde con rascados sin límites, autolesiones (situaciones que sucedían en la
infancia también).
Un cuerpo en este tiempo tranquilo,
asexuado, que se viste con la ropa de ballet. Un espejo que le devuelve su
imagen como bailarina.
Idas y vueltas a ensayar, poco lazo social,
una bailarina como las otras. Con su aspiración de querer ser perfecta.
Algo de este primer tiempo nos circunscribe
una estabilidad tópica, una nominación, y un proyecto de “trabajo continuo en
aspirar la perfección” en el ensayo con otras en la “compañía de ballet.”
2) Despierta con una certeza de un sueño
que ella era la protagonista de una versión diferente de la obra de El lago de
los cisnes.
Ella quiere ese papel (ser la reina de los
cisnes) y su trabajo para lograrlo comienza a excederla subjetivamente,
sensaciones de desdoblamiento, fenómenos de cuerpo y pasajes al acto irrumpen.
La
presión de ser elegida como la protagonista, solista, la arroja a un lugar
simbólico al cual no puede responder,
rompiendo así su precaria estabilidad tópica, casi al modo de Schereber cuando
como Presidente no puede responder con
los mecanismos imaginarios que habían operado eficientemente hasta ese momento.
A partir de ese lugar-función que es
llevada a ocupar, se produce un vacio enigmático propio de la forclusion y como respuestas en lo real una serie de acontecimientos le suceden. Cada
vez mas alucinaciones visuales en su cuerpo convirtiéndose en el cisne negro,
localizando su espalda y sus brazos con bellos.
El empuje a la sexualidad, no abrochada al
significante fálico, se desborda por doquier.
Sufrimiento psíquico aparece en distintas
escenas mientras va increyendo la
agresión hacia su madre y una despersonalización, se va transformando en la que
debe ser el cisne negro frente a lo que la sujeto había construido, el cisne
blanco. Pasajes al acto: rompe los dibujos de la madre, rompe cosas…escucha que
le hablan, la miran: la voz y la mirada pulsiones desabrochadas que irrumpen
cada vez mas. Todo este tiempo nos va mostrando la desestabilización de la
sujeto y los fenómenos elementales. La dualidad desatada entre el cisne blanco
y el negro y su transformación en el mismo.
El momento de retorno a su casa alucinando con su amiga una relación sexual, amiga que se convertirá
luego en su rival de vida, con un tinte
paranoico que la lleva en su momento 3) al desenlace, tiempo de
confusión absoluta, desencadenada, brotada. Se pone en tensión en las escenas
muy claramente la desorientación del sujeto enloquecido entre la obra y su
vida, ella y el personaje, que culminara con el pasaje al acto del suicidio logrando su propia muerte, la de ella y su ser
en tanto era el cisne. Dirá como frase final que alcanza su ideal de libertad… Fui
perfecta….Y el ovacionar de su nombre….
La trama de la película nos orienta en esas
precarias pero sólidas construcciones logradas para funcionar en la vida y como
puede acontecer lo peor para quien no está preparado psíquicamente, y es llamado a ocupar una
función simbólica cuando no se cuenta con la regulación de la ley fálica.
Es la historia de un sujeto que supo
armarse una vida con su ser bailarina, hasta que quiso protagonizar el papel de
ser la reina del lago de los cisnes, personaje en el que se convirtió y encarno
hasta con su propia muerte.
A modo de cierre tomo el afiche ya que es
un rostro partido, quebrado, ese punto delicado donde algo ya no puede ser como
funcionaba antes… el autor, nos muestra
el dramático pasaje de un sujeto que se
desencadena, no logra su estabilización, el sufrimiento psíquico, un goce
desenfrenado, sin límite…
Lo
Real…en esa danza hechizada con la muerte.
Florencia Lafourcade
No hay comentarios:
Publicar un comentario